INSTRUIR AL QUE HABITA EN EL INTERIOR DE LA CABEZA

Hace decadas habia… empleamos el preteritado del verbo ¿sabes si todavia existe..? por la sencilla razon que desconocemos si aun perdura, como decimos… ubicabase en nuestra bellisima trimilenaria capital gaditana, un lugar de hospedaje mas bien sencillito y cortito en referencia al pueblo de Jesulin, llamado “Fonda Leo”.

Al llegar los clientes a dicho recinto, y una vez estampadas sus firmas en el libro inscriptor, recibian a manos de su conserje recepcionista las llaves de la habitacion y un pequeño libro.

Logicamente quedaban perplejos, y preguntaban asombrados el porque del libro, a que venia recibir tal. Con rauda y precisa, a la vez que presta rapidez, el dispuesto agasajador les espetaba casi malhumorado “¡¡pero bueno..!!, ¿es que acaso no ha visto en la puerta como se llama este sitio..?, ¡¡pues esta muy clarito macho… en el cartel de la calle lo pone!!…Fonda Leo”.

Nada tendria que ver estas anecdotas casi reales en nuestros pensamientos, sino fuera por la sencilla razon de mezclar el susodicho y abreviado nombre con uno de los homenajes que vamos a efectuar desde aqui en jornada venidera al ser mas prolifico en la historia de la humanidad.

Os ofreceremos la verdadera historia de don Leonardo Da Vinci, la autentica, la que no contemplan historiadores ni biografos eruditos. Fue, como bien sabeis, un sobrenatural arquitecto, inventor, escritor, pintor, visionario, ingeniero y acaparador activo de todo lo relacionado con la mente… la fresa, la nata. Un verdadero genio, ciertamente no seria para nada exagerar la conceptuacion de portentoso en grado sumo… resto, multiplico y divido hasta llegar al numero deseado.

Asi que mucha atencion, el relato nos llevara a comprender el inigualable cerebro que poseia el que inspiro al dueño de la mencionada fonda para recordar su legado.

Editorial: Los Viernes siempre se toman como prologos del ansiado fin semanal, razon mas que suficiente para activar los sentidos. Gran pegada musical es la que dejamos un dia mas. A disfrutar que se dice… ¡¡niño…!!, que se dice ¡eh?, disculpe usted, es que se pone muy nervioso, pero en verdad es muy educado… ¡¡niño…!!, dale las gracias al hombre… ¡¡haz el favor!!, …desde luego hijo siempre me dejas fatal… ¡¡que niño…”.  

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